Durante años el famoso papel de burbujas de plástico que explotaban ante la presión ha acompañado los embalajes de dispositivos electrónicos delicados (y también de muchos otros elementos). Su misión protectora frente a impactos estaba bien probada mediante cientos de mini burbujas de aire encerradas en plástico que absorbían los golpes e incluso llegaban a reventar con el fin de realizar su trabajo de forma profesional.
Su popularidad no ha sido resultado tanto por su eficacia como por su función de diversión y antiestrés que lo ha hecho mundialmente famoso. Pero ahora se abre un futuro incierto para este papel de burbujas, porque el fabricante -Sealed Air Corp- ha decidido cambiar el conocido diseño explosivo por uno nuevo tubular que ya no explota. Su nombre iBubble Wrap.
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